La ministra de Seguridad social, Elma Saiz, fue, en su momento, el chiste de la Navarra política. En el Reino Foral, nadie ponía en duda su incapacidad ni su flexibilidad: incapacidad manifiesta para gestionar y flexibilidad máxima, con tragaderas inconmensurables, para mantenerse en el poder, de la mano de María Chivite, gracias a los filoetarras de Bildu.

Pero ha tardado poco tiempo doña Elma en asumir su nuevo papel de ministra del Sanchismo: igual de ineficaz pero mucho más presumida y, sobre todo, una mentirosa dispuesta a creerse sus propias mentiras.

Como explicaba, mejor que bien, Pablo Ferrer en Hispanidad, el martes 27, Elma fue la encargada de dar las 'buenas noticias' -este Gobierno no deja de darnos buenas noticias- en la rueda de prenda posterior al Consejo de Ministros.

Podemos resumirlas en dos hitos, naturalmente "históricos": los autónomos pagarán más cuotas sociales -aunque lo están deseando, que conste- y los trabajos 'penosos' -no, no se refiere al trabajo de Elma- podrían jubilarse antes, incluso a los cincuenta y pocos años... con lo que cargarán, aún más, el balance de la Seguridad Social. Vamos, que vuelven la termita de las prejubilaciones: aquel fenómeno de las empresas de finales del siglo XX que alguien definió como cerrar bibliotecas. A los trabajadores con más experiencia se les mandaba a casa cobrando parecido, para que vivieran regaladamente durante 40 años. A cambio, se precarizó el empleo de los jóvenes que empezaron a no poder formar una familia.

 

 

Para entendernos, caminamos en dirección opuesta a la necesaria. Donde deberíamos estar sería en la supresión de las cotizaciones sociales y en pagar las pensiones con IVA.

Por contra, Elma Saiz ha decidido lo contrario: más jubilaciones anticipadas -trabajos "penosos", le llama- y más impuestos contra profesionales, autónomos y emprendedores. Y en esto, como en otras muchas cosas, el PP hace seguidismo y no plantea una alternativa. En este caso, la alternativa consistiría en suprimir las cotizaciones sociales, el impuesto que grava el empleo y pagar las pensiones con IVA. Un sistema que ha funcionado en otros países europeos, como Dinamarca. Con la supresión de las cuotas sí que podríamos tender al pleno empleo y dejaríamos de ser el país con más paro de toda la Unión Europea y de toda la OCDE.

Pensiones, el mayor problema de la economía española. La paternidad constituye el principal medio de maduración de la persona. Un país sin padres y sin madres está condenado a la abulia. El inmigrante no es la solución, sobre todo porque, con una economía subvencionada, no se integrará jamás. Dicen que Estados Unidos es un la primera potencia mundial gracias a los inmigrantes. Claro, a los inmigranes sin subvenciones que tenían que trabajar para ganarse el pan. Lo hicieron, se convirtieron en estadounidenses y crearon el país más poderoso del mundo. Esa inmigración poco tiene que ver con la de Sánchez y me temo que tampoco mucho con la de José Cobo. No le des subvenciones a la gente: deles libertad y no les frías a impuestos.

La solución no es la inmigración. Se necesita más tiempo para restaurar una casa que para construirla. Se necesita más tiempo para poder cargar sobre los inmigrantes el coste de nuestros ancianos que para rejuvenecer España. Tenemos que tener más hijos y a eso ayudaría la instauración del salario maternal.

Pero no. Elma prejubila y eleva los impuestos a todo aquel -autónomos, emprendedor, profesional, que se construye su propia máquina de facturar. Un genio, esta Elma. Es muy probable que llegue a gobernador del Banco de España.